lunes, 27 de mayo de 2019


Andrés Manuel López Obrador

Por el bien de Baja California… ¡Cuidado con
Bonilla!... ¡Y también con Arturo González!

A mi familia, a mis amigos, a mis conocidos en Baja California, a todos aquellos con los que mantengo comunicación, les he advertido sobre la seriedad, el compromiso y la altísima responsabilidad, con que se debe actuar el domingo próximo, en el momento de emitir el voto, pues se estará decidiendo entre dos proyectos, uno el que abandera, cuida y estimula los intereses de quienes han saqueado al Estado, pero también perniciosos grupos de poder norteamericanos, que encabeza Jaime Bonilla Valdez y, el segundo, el que acaudilla el arquitecto Jaime Martínez Veloz, quien a lo largo de su vida y trayectoria, ha acreditado que para él, efectivamente, primero los pobres.
        El momento de la emisión del voto, es tan importante, porque se estará ante la decisión de colocar o no, de nueva cuenta a Baja California, en manos criminales, como lo ha estado durante 3 décadas en que ha desgobernado el Partido Acción Nacional (PAN), hoy con el último de sus representantes en el gobierno, Francisco Vega de Lamadrid, un sujeto ladrón, ignorante y cómplice de quienes pretenden despojar de la riqueza natural al Estado, aquellos a los que representa y protege Jaime Bonilla Valdez.
        Hoy en el colmo de la desfachatez, el oportunismo y la bajeza política, como las ratas cuando el barco hunde, son decenas de priístas, panistas, perredistas y cualquier número  de aventureros, que apuestan a ganar, lo mismo empresarios que representantes sindicales, los que reptan a los pies del desflemado, cobarde y apocado Jaime Bonilla Valdez, a quienes sólo aquellos que aspiran a vivir de la lisonja, reconocen virtudes.
        Todos aquellos que hoy aplauden a su paso a Bonilla, se desgañitan empalmando el proyecto del “México-americano” con el de Andrés Manuel López Obrador, pero nada más lejano de la realidad, porque para el cómplice de los Arellano Félix, no hay nada más distante, ni más lejano, que el interés de la ciudadanía, el interés de los bajacalifornianos.
        Morena en Baja California, se inundó de fifís oportunistas, esa clase rapaz y saqueadora, que hoy habla mal, critica y enloda a quienes les dieron de tragar; mañana harán lo mismo cuando la realidad alcance a quienes habitan en la franja norte del país y se reflejen en el espejo del fracaso, con un proyecto que jamás verá, más que por los intereses particulares de sujetos que como Bonilla, y los riquillos que hoy lo rodean, como el perro a la puerta de la carnicería.
        Igual que en el Estado, con Jaime Bonilla, en Tijuana el cambio verdadero, ese al que aspiramos todos quienes tenemos intereses en Baja California, sólo se dará con el Teniente Coronel Julián Leyzaola Pérez, porque Morena y quien abandera esa marca en la ciudad, Arturo González Cruz ha vivido al amparo de negocios con criminales. Es un sujeto tramposo, ladrón y cobarde, profundamente cobarde, que ocupa siempre el brazo de terceros, para cobrar afrentas personales.
        El domingo será un día crucial para Baja California, por eso mis amigos y mi familia, no votarán por todo aquello que es contrario a la política social y de compromiso con los pobres, que abandera Andrés Manuel López Obrador, todo lo que representan Jaime Bonilla Valdez y Arturo González Cruz, ambos cómplices de criminales y gobernantes corruptos con los que se han enriquecido al amparo de contratos que en la mayoría de los casos, soportan sólo aire, porque se cobra, se ha cobrado, sin otorgar los bienes y servicios que se han pactado con el estado o los ayuntamientos.
Por eso, Por el bien de Baja California… ¡Cuidado con Bonilla! Y También con Arturo González Cruz!