Excelente entrega de mi amigo Ricardo Madrigal, en la que enuncia
razones de peso, que permiten adelantar la derrota del candidato del PRI, y la coalición
de oportunistas que lo acompaña en la candidatura, a la presidencia municipal
de Tijuana, René Mendivil Acosta.
Y es que con esa precisión que lo
distingue, enlista los pasivos que le significará la basura política que le
endilgaron en las regidurías; hombres y mujeres a quienes repudia la militancia
de sus propios partidos, los ejemplos a la mano, son los hijos de Eligio Valencia Roque; Eligio Valencia López, así como el
primogénito de Mario Madrigal Magaña,
el también parásito Jorge Mario Madrigal
Silva.
Lo peor del caso es que toda esa
pedacería de oportunistas y vividores, beneficiarios de partidos que no son más
que cuevas de ladrones, cuando menos hasta el hijo del Mario el Elefante Madrigal, tienen seguro su pase al próximo ayuntamiento, lo que no
ocurre con René Mendivil que, a
sabiendas de que va a perder, con el voto en contra del priísmo del Hipódromo, se dedica a guardar lo$ apoyo$ que se le acercan para la campaña.
Pero no sólo esa contracorriente
debe remontar Mendivil, tiene también
en contra el rechazo colectivo, por el repudio que generó la pestilente corrupción
y el pendejismo que etiquetó la administración del pusilánime, inepto y ladrón,
Jorge Astiazarán Orci, a quien
mantuvo con el pie en el cuello el corruptísimo candidato a diputado por el
distrito XVI, Bernardo Padilla Muñoz que,
a su vez, también contribuirá a la derrota priísta en Tijuana.
A Bernardo Padilla no lo quiere ni su familia. Su padre, Praxedis Padilla me ha dejado ver su descontento,
por el hecho de que su hijo prefirió asociarse con narcotraficantes y con
grupos criminales, que trascender correctamente en la política. Y si, ni su
padre votaría por él, menos lo harán los cientos de empresarios de giros negros
que siguen siendo extorsionados por su gato, Jesús Velasco Soto, que actúa como perro, cuando pasa por
las maletas que le entregan los
dueños de giros negros.
Me dicen que el Chuy
pasó un charolazo para juntar 250 mil
dólares para la campaña del patrón, como llama a Bernardo Padilla, obvio, con la amenaza
de que aquel que se negara a cooperar, sufriría las consecuencias: el cierre de
sus negocios.
Sin más, la entrega de mi
amigo Madrigal:
INTRIGAS
#Despeñadero
Mal pinta la campaña para la alcaldía de Tijuana de René Mendivil Acosta, este personaje que es un político en todo el sentido de la palabra (difícilmente cumple lo que promete), que parece tener un grave problema con los números (dice ser #664, cuando toda su vida política ha sido #666 y si alguien lo duda… que le pregunten al diablo), pero que con los candidatos a regidores y diputados locales que escogió… o le impusieron, se dirige inexorablemente al precipicio o despeñadero, es decir… !a la derrota!.
Después de muchos dimes y diretes, el orgullo del nepotismo, el junior junior Eligio Valencia López, hijo menor del dueño en el estado del cascaron y siglas de la seteme, le fue otorgada la regiduría número 1… aunque sea ilegalmente. El bueno para nada de Valencia López, hasta donde se sabe ni la escuela ha terminado, con lo que no es el mejor ejemplo de la juventud que dice representar. Es de todos conocido, que la seteme (CTM) en lo general y junior junior en lo particular, en lugar de darle votos al candidato… se los quitara.
Y decimos que su registro es ilegal, ya que no cumple con el tiempo de residencia que marca la ley, en esto no hay pierde, hace tres años comprobó que residía en el vecino municipio de Rosarito, con el fin de poder ser suplente de Regidor en la citada municipalidad, lo que en el mejor de los casos, le da menos de tres años de residencia en Tijuana, lo que no cumple con lo que se estipula en la ley. Eligio Valencia junior junior mintió y/o faltó a la ley hace tres años o lo está haciendo ahora, pero de que debe de perder la candidatura y ser procesado… no cabe duda.
Este imberbe hijo de papi, que ya dos veces lo hizo suplente (de regidor en Rosarito en la actualidad, y también actualmente en una diputación federal plurinominal), y que cuando de casualidad tomó posición por la enfermedad de su titular (un vejete… digo veterano administrador aldeano de sindicatos) de la regiduría, no lo dejaban restituirse en su cargo al titular, nomas por capricho del dueño estatal de la seteme, quien no podía dejar sin cuota de poder… al orgullo de su nepotismo.
Por cierto, quien queda como mentiroso con este registro (otro día platicaremos de otras situaciones similares), es Don Beltrone Manlio Fabio Beltrones Rivera, quien se ha cansado de presumir y de ladrar a los cuatro vientos su promesa de que su partido postulará a candidatos con una trayectoria limpia, lo que está visto… no cumplirá. Ya que si muchos de los que presento son de trayectoria limpia, imagínese usted los de… trayectoria sucia. Dios nos agarre confesados.
Hay que recordar, que algunos de los cuates, compinches y asociados de Eligio Valencia López, han sido ejecutados por el llamado crimen organizado, y que este mismo –según información pública- se tuvo que ausentar de la ciudad, ya que el clima no lo favorecía, y se temía por un posible problema de salud.
El resto de la planilla esta para llorar, la gran pregunta es cuántos votos le quitarán estos prospectos de regidores a Mendivil Acosta. La Regiduría número 2 queda para Anel Fabiola Martínez Gutiérrez, del Partido del Trabajo (PT) como cuota por prestarse… digo participar en la coalición. Ya ha sido candidota en otras ocasiones (regiduría y diputación), pero nunca ha llegado. No hay nada que presumir.
La Regiduría número 3 para Mariano San Román, cuota del Partido Verde y como tal parte de la célula delictiva de Alí Babá y los cuarenta ladrones. Famoso porque perdió una diputación federal (la única que perdió en Baja California la coalición PRI-Verde en 2012) por sustraer los recursos a utilizarse en su distrito el día de la elección… y como buen verde, por su gusto desmesurado por los latrocinios en las dependencias por las que pasa.
La regiduría número 4, es cuota del Partido Nueva Alianza con María Elena González Martínez, grilla magisterial y nada más que decir, solo que servirá al mejor postor, sobre todo si triunfa el Patas. La regiduría número 5, es para Jorge Mario Madrigal Silva, otro orgullo del nepotismo, con apoyo de unas siglas que no conllevan un mayor número de votantes. Al contrario, una parte de su gremio (como son los llamados taxis amarillos) seguramente (como acostumbran) votarán por los azules.
La regiduría número 6 es para Julieta Aguilera Castro, cuya única gracia es ser hija de Silvia Justina y por supuesto, sobrina del diablo Fernando Castro Trenti, es decir… otro caso de nepotismo. La regiduría número 7 es para Érick El Terrible Morales, el mismo que fue titular del deporte con Jorge Gramos Hernández; uno más que sus colores son los de los billetes… no el de partido político alguno, y que llega impulsado por su intima cercanía con la diputada local Miriam Ayón Castro, es decir… mas nepotismo. Y la regiduría número 8 es para Blanca Lilia Gándara, ex sub delegada de La Gloria y miembro de ese fantasma denominado CNOP… con nada que presumir.
Mención especial merece la próxima sínica procuradora, Verónica Judith Corona González, que es parte de la clica que es dueña del nefasto disque verde/ecologista en la entidad (los Ledesma Romo) y jefes de la célula delictiva de Alí Babá y los cuarenta ladrones., con los cuales fue titular de la paramunicipal Sistema Municipal de Parques Temáticos de Tijuana (Simpatt) y regidora en los tiempos del Bucólico Carlos Walterio Bustamiente, y en CONAGUA de gobierno federal con su patrón el “Pochongo” Eduardo Ledesma Romo… donde siempre ha tenido señalamientos de corrupción (igual que sus jefecitos). Es de imaginarse que en la sindicatura municipal seguirá el camino del Prozac o Pildorón Arturo Ledesma Romo, en cuanto a exigir el 50% de todos los ingresos debidos a la corrupción en la administración pública de Tijuana, y cifrados en ochenta millones de dólares por parte del dotor Chapatín Jorge Enrique Astiazarán Orcí, el cual por cierto se quedó extremadamente corto en su estimación.
Quien no pudo colocar aunque fuera a un solo compinche o lacayo, fue precisamente el dotor Chapatín Jorge Enrique Astiazarán Orcí, con decirle que ni a quien vendió como jurídico de Don Beltrone, un tal Gerardo Herrera Zavala, quien al ser solo un objeto de ornato en el CEN del PRI, se le quemaban las habas por ser regidor y estar cerca de los “negocios” que tanto practicó y… practica este trienio, con pingues ganancias (recordemos que hasta un costosísimo automóvil nuevo BMW quiso comprar de contado y en efectivo en una agencia de Tijuana).
Herrera Zavala, está en el centro de una buena cantidad de investigaciones por irregularidades cometidas en la presente (des)administración municipal, una de ellas por un asunto (será el de las luminarias o el de las cámaras de fotomultas?), en el cual el ayuntamiento no tenia porque pagar cantidad alguna… pero se pactaron ocho millones de pesos y se terminaron firmando… ciento cincuenta millones, ni más… ni menos. Eso sí, la repartición estuvo intere$ante.
Y ni crea usted que por trasladarse hace unos pocos meses al la Ciudad de México dejó de hacer negocios, ya que con la venia de Astiazarán Orcí, dejó al frente de la dependencia a su segundo de abordo y principal compinche, un tal Jorge Borja, con quien las principales aéreas de la consejería jurídica municipal han seguido generando negocio$ y bisne$, empezando por la dirección de jueces municipales a cargo de Luis Carlos Ayala Appel, que recauda un día sí y otro… también.
***El próximo jueves, comentaremos la planilla que acompaña al Patas Juan Manuel Gastélum, y en entregas posteriores las de otros partidos (de alguna forma hay que llamar a la chiquillada) y los candidatos a las diputaciones locales.